jueves, 26 de abril de 2012

DAVID LEBON. GENIO, VIRTUOSO Y HUMILDE


Inició su relación con la música cuando, a los ocho años, debió partir hacia EE. UU. Su estadía en el país del norte coincidió con el nacimiento de la «beatlemanía» lo cual, como a la gran mayoría, influyó decisivamente en su futuro.

Fue así que aún siendo menor de edad, lo que no le permitía permanecer en los boliches rockeros formó parte de pequeños grupos como The Alley Cats (donde tocaba la guitarra) y The Lords of London (en batería).

Tras su regreso, a fines de la década del sesenta, frecuentaba “La Manzana”, uno de los pocos boliches de rock que existían en Buenos Aires, regenteado por Billy Bond, el más polémico pionero del rock. En ese sitio conoció a Pappo —otro estable del lugar, al igual que Nacho Smilari y Héctor Starc— quien en 1970 lo incorpora como bajista en la primera alineación de su grupo Pappo’s Blues, conformada también por Black Amaya en batería y un fugaz paso del bajista Vitico. Esta primera formación de Pappo’s Blues registró un disco en 1971.

Simultáneamente Lebón participó como guitarrista con el baterista Black Amaya en la grabación del disco de La Pesada del Rock and Roll junto a Billy Bond.

Su necesidad de estar en actividad lo llevó a acompañar al cantante Carlos Bisso y luego partir a España. Allí 
se volvió a encontrar con Pappo, con quien formó un fugaz grupo del que también participó Ciro Fogliatta.

A fines de 1971 fue baterista de Color Humano, grupo liderado por Edelmiro Molinari, en esta alineación grabó el álbum debut con cinco temas para el sello Microfón.

Pescado Rabioso

En 1972 Lebón dejó la agrupación y su puesto fue ocupado por el baterista rosarino Oscar Moro. Ese mismo año, Lebón entró en el conjunto Pescado Rabioso, fundado por el guitarrista Luis Alberto Spinetta. Esta nueva banda compuesta por Spinetta (guitarra y voz), Carlos Cutaia (teclados), Black Amaya (batería) y David Lebón (bajista y ocasional guitarrista y cantante), editó un álbum titulado Pescado 2. Diversos inconvenientes de producción derivaron en la separación de la banda.

En 1973, Lebón grabó su primer álbum solista (David Lebón), que salió en 1974, que contenía toda su fuerza rocanrolera. 32 macetas —un tema que volvería a grabar años después—, Dos edificios dorados y Hombres de mala sangre son algunos de los temas que se destacan de este disco compuesto en coautoría con su pareja de entonces, Liliana Lagardé. En esa misma época colaboraba casi constantemente tocando como invitado la guitarra en Sui Generis y los teclados en el grupo sinfónico Espíritu, además de participar como cantante en dos temas del segundo disco solista de Claudio Gabis.

En 1974 formó su propio conjunto, Lila, un grupo de características devocionales, junto a Carola y Carlos Cutaia que editó un simple, actualmente inconseguible.

Participó en la segunda grabación de La Biblia, el legendario disco de Vox Dei, y ese año regresó a Pappo’s Blues (como guitarra rítmica) y a La Pesada.

Polifemo

Casi sobre el final de 1975 creó Polifemo, una banda de rock and roll puro, con Juan Rodríguez en la batería y Rinaldo Rafanelli al comando del bajo, ambos provenientes de Sui Generis. En 1976, tras la presentación de su disco Polifemo, la crítica especializada fue muy dura con ellos, lo que marcó su decadencia. «Salí de Polifemo con la intención de no armar ningún grupo, con ganas de viajar —admitía Lebón en una entrevista. Con el único tipo de Polifemo con el que me seguía comprendiendo era Juan Rodríguez.

Con su nueva agrupación, Lebón empezó a crecer como músico pues, como él mismo lo reconocía, junto a Rodríguez, los músicos de la misión y varios invitados (Pino Marrone y Aníbal Kerpel, entre otros), David Lebón formó Seleste. Esta agrupación, de buenas perspectivas, quedó momentáneamente interrumpida cuando Lebón se unió en Brasil a Charly García en el proyecto Serú Girán.

Serú Girán

Entre 1978 y 1982 integró Serú Girán, junto a Charly García, Pedro Aznar y Oscar Moro, en donde fue distinguido como Mejor Guitarrista los cinco años consecutivos. Si bien siempre cumplió un papel secundario detrás de la figura arrolladora de Charly García, es en Bicicleta (1980) donde más se destaca su labor como compositor y vocalista.
  
 
 
Solista
En 1980 lanzó su segundo disco como solista: Nayla. Este álbum, que tuvo muchas postergaciones debido a un accidente de su hija, iba a ser en principio un disco doble, pero ninguna compañía se lo aceptaba. «Ni siquiera Yes graba discos dobles», le llegaron a decir. No le quedó otra opción, entonces, que seleccionar los mejores temas.

Con Serú Girán ya separado, su producción como solista fue incrementándose. Estos son:

El tiempo es veloz (1982), donde se rescatan el tema homónimo y No confíes en tu suerte;

Siempre estaré (1983), con temas exitosos como El rock de los chicos malos y Quiero regalarte mi amor;

Desnuque (1984), un homenaje al rocanrol del cual sobresalen Qué te pasa, Argentina, 32 macetas y Hacelo hoy conmigo;

Y si de algo sirve (1985),

7 × 7 (1986)

Nunca te puedo alcanzar (1987).

En 1987 colaboró con Charly en su LP Parte de la religión, donde grabó unos solos de guitarra.

En 1989, edita Contactos. Lo define como «un encuentro personal entre mente,
cuerpo y alma para lograr el equilibrio que mejore mi relación con el mundo, las personas y mi Creador».

En 1992 edita Nuevas mañanas que pasa totalmente desapercibido. Es quizás el disco más flojo de su carrera, tomando un sonido más pop y sin tantas guitarras.

Serú Girán

A fines de 1992 fue el reencuentro de Serú Girán. Editaron un disco en estudios y dos en vivo. Realizaron una exitosa gira y se disolvieron definitivamente.

Lebón tuvo dos años de silencio musical, que lo tuvieron presente en las revistas del corazón por sus idas y venidas con la ex modelo Pata Villanueva. En 1995 retornó a los escenarios, primero con el Tributo a Carlos Gardel organizado por la Secretaría de Cultura y el Multimedios América y, luego, acompañado por Daniel Castro (bajo) y Daniel Colombres (batería), realizó una recorrida por toda su extensa trayectoria. Ese año se radicó en la provincia de Mendoza.

En 1999 se presentó en el Teatro Coliseo de Capital, para repasar los temas más importantes de su carrera acompañado por una joven banda con músicos de Divididos, la Misisipi, Los Ratones Paranoicos y Los Caballeros de la Quema, una sección de bronces y otra de brass. El show quedó registrado en el álbum En vivo en el Teatro Coliseo.

En el 2002 editó Yo lo soñé, su último disco hasta la fecha.
                                                                                                                                                
Estilo

Su estilo de tocar la guitarra es netamente blusero y rocanrolero, con marcadas influencias de B. B. King. David Lebón se autodefine como un músico no profesional, en ambos sentidos: como un músico no contaminado por el show-business, pero a la vez indisciplinado e intuitivo en la creación. El suyo es un caso extraño. Su personalidad ha sido eclipsada por otras más fuertes (léase Pappo, Spinetta o Charly. A lo largo de su carrera integró muchos grupos, y lo hizo tocando los cuatro instrumentos base: guitarra, bajo, batería y teclados, aunque siempre se lo haya destacado por su sentimiento para tocar la guitarra eléctrica.